En
anteriores entregas inicie una serie de artículos en relación con el riesgo
cibernético marítimo, la seguridad cibernética, la presencia de sensores y
dispositivos interconectados en la navegación, la introducción de contratos
inteligentes, la implementación del blockchain,
y otras capacidades tecnológicas que han provocado un cambio en la industria
marítima en general.
Esas tecnologías emergentes se encuentran
en constante desarrollo y se están utilizando al servicio de empresas, puertos,
la logística, el comercio y el transporte marítimo internacional, trayendo
consigo innumerables beneficios pero al mismo tiempo nuevos problemas que
atender.
En esta oportunidad realizaré un
pequeño recorrido por una de las tecnologías autónomas que está marcando toda
una innovación en el ámbito marítimo, como son las aeronaves no tripuladas (Unmanned Aerial Vihicle (UAV) conocida
como drones, los cuales desde el aire pueden capturar imágenes sorprendentes,
siendo utilizados para revisar desde lo alto arrecifes de pesca, inspeccionar
presas y examinar infraestructuras de los puertos, conjuntamente con otras
actividades logrando aportar importante información en labores especificas. Esa
tecnología implementada en los sistemas aéreos no tripulados es introducida
ahora también en el mar.
En la medida que ese conocimiento de
las tecnologías se apliquen a las operaciones y la demanda de servicios sea más
competitiva por la interconexión, la introducción de sistemas digitales en las
operaciones será cada vez mayor. Las empresas que no logren adaptarse a la
digitalización y automatización de los sistemas corren el riesgo de ser
desplazadas y no subsistir frente a otras que funcionan con avanzados sistemas tecnológicos
que las hacen más competitivas.
De igual forma, se está comenzando la
construcción de los denominados buques autónomos, propiciando uno de los
sistemas tecnológicos más avanzados, los cuales se espera que operen sin
tripulación, lo que ha causado cierta preocupación en la
industria marítima.
Si bien es cierto que existe esa preocupación
en la industria marítima, no es menos cierto que los beneficios que esas
tecnologías proporcionan, son innegables, en ese sentido la Conferencia de
las Naciones Unidas para el Comercio y Desarrollo (UNCTAD), en
el informe edición, 50 aniversarios sobre el Transporte Marítimo,
2018, establece muy especialmente:
"Los avances tecnológicos que incluyen inteligencia artificial, Internet de las cosas, aplicaciones de blockchain, buques autónomos, drones y otros tienen el potencial de aumentar la eficiencia en la industria global del transporte (...), dado que el crecimiento de la demanda del comercio marítimo se está adelantando a la oferta, según los últimos datos del informe, las nuevas tecnologías podrían introducir costos, tiempo y eficiencias ambientales que son muy necesarios".
En efecto, una de las tecnologías
autónomas que se está implementando en la navegación y el transporte
marítimo por su versatilidad y funcionalidad, son las aeronaves no
tripuladas o drones, considerada como una de las tecnologías disruptivas
más innovadoras que está siendo utilizada en operaciones relacionadas con
terminales portuarios y actividades submarinas.
Dron: (Imagen de Thomas Ehrhardt en Pixabay) |
Existen drones que son pilotados por un operador que lo controla desde tierra de
forma manual a través de una palanca de mando o joystick, es decir
una persona tiene el control y maneja a distancia la operación del
aparato. Estas aeronaves no tripuladas se han utilizado
principalmente para llevar objetos a lugares alejados y en zonas de desastres,
en donde los servicios de transporte de mensajería y paquetería son los que
se han visto más beneficiados con estos aparatos, ya que tienen la ventaja de
poder llegar y realizar entregas a lugares apartados.
Pruebas
recientes han corroborado como la tecnología utilizada con drones es de gran
utilidad. Por medio de estas pequeñas aeronaves se han realizando entregas de
productos de menor peso y tamaño desde tierra hasta los buques que están a
corta distancia de la costa, valiéndose de una especie de corredores
aéreos que evitan interferencias logrando transportar cargas livianas, prescindiendo
del uso de botes y personal para llegar hasta las embarcaciones.
El uso de estos
aparatos en el campo de la actividad marítima ya son una realidad y pueden ser
utilizados en diferentes tipos de proyectos, tales como investigación
submarina, búsqueda de naufragios y en operaciones de salvamento y muy
especialmente están siendo utilizados para las instalaciones offshore
y para complementar las inspecciones que requiere el casco de los buques.
Los drones
también se están utilizando para realizar inmersiones submarinas, mientras son
operados en superficie desde un buque para trasmitir las imágenes captadas en
las profundidades en tiempo real. Su utilidad ha sido más que
demostrada y sus diferentes diseños son puestos de manifiesto por importantes
compañías que han financiado prototipos de gran utilidad y versatilidad que
están causando toda una revolución tecnológica en la navegación y el transporte
marítimo.
De igual forma, existe otro tipo de dron, creado por una empresa francesa, de nombre Notilo PLus, ubicada en Marcella, siendo una empresa emergente que está llevando un programa conocido como NVIDIA Inceptión, quienes han trabajando con un dron subacuatico y autónomo al que han denominado iBubble. Al diseñarlo la intención era que los buceadores pudieran dedicar más tiempo a la investigación y menos tiempo a filmar, logrando comunicarse con el dron mediante un dispositivo remoto que permite llamar al iBubble y cambiar el enfoque de filmación. Los drones subacuáticos creados por la empresa Notilo PLus, pretenden al mismo tiempo servir a las empresas navieras y a los grandes buques que requieren de las inspecciones del casco que se hacen de forma periódica, lo innovador está en que no utiliza el cable tradicional, por ello se le conoce como (Autonomous underwater drone) y por tanto su versatilidad en el agua es mayor, en caso de detectar algún problema es posible conectar un cable opcional para enviar el material en vivo a la superficie. El dron iBubble puede recorrer el ancho y largo del buque y capturar cada centímetro en un vídeo de alta calidad.
El dron iBubble fue
utilizado en la exploración de un naufragio el Exploring the SS
Thistlegom, un buque hundido en el Mar rojo, de 126 metros de
eslora, pecio que fue encontrado a mediados de los años 1950 por el
conocido explorador Jacques Cousteau, sin embargo se reservó su
ubicación y en los años 1990 fue encontrado por un grupo de buceadores en la
zona (Sharm el Sheikn), el siguiente vídeo, enlace: https://youtu.be/yxcu1e0AZvA permite
apreciar excelentes imágenes con el dron iBubble, durante
la exploración submarina:
Sin embargo las
tecnologías disruptivas, también representan algunos riesgos para la
industria naviera, su elevado costo permite que sólo ciertas empresas puedan
hacer uso de ellas. Las empresas requieren contratar personas especializadas y
ante el impacto de amenazas externas, deben mantener un buen
sistema de gestión de riesgos para evitar posibles daños
cibernéticos, además requieren mantener controles a los sistemas informáticos
que les permita alcanzar la seguridad cibernética en sus operaciones, lo que se
traduce en aumento de los costos operativos.
Esa integración
de tecnologías nuevas y avanzadas es un tema que la Organización Marítima
Internacional (OMI), lo ha puesto como uno de sus principios
estratégicos, dejando claro que es necesario equilibrar las ventajas que se
derivan de las tecnologías nuevas y avanzadas frente a las preocupaciones en
materia de seguridad y protección, la incidencia que derivan al medio ambiente,
la facilitación para el comercio internacional, los costos posibles y las repercusiones para
el personal tanto a bordo como en tierra.
Los nuevos
riesgos a los cuales se expone la navegación y el transporte marítimo necesitan
un tratamiento diferente o especial, se requieren al mismo tiempo nuevas
capacidades y experiencia técnica para atender problemas de
Ciberseguridad, los cuales crecen en la lista de prioridades para las compañías
marítimas y no existe una forma única de cómo solucionar y aplicar la
seguridad cibernética a los incidentes que se presentan.
Es necesario que
las empresas ejerzan un control sobre los riesgos asociados con las
tecnologías emergentes, en el caso de las tecnologías autónomas, estos
comienzan por ser identificados de forma integral tomando en cuenta las
capacidades tecnológicas de las organizaciones, las aseguradoras y las empresas
deben tener en cuenta que no existen regulaciones especificas ya que en su
mayoría siguen sin desarrollarse, constituyendo todo un desafió para la
industria marítima y el entorno jurídico.
Buques que
podrán navegar solos, sin tripulación, sistemas inteligentes que hacen
posible controlar la navegación autónoma, centros de datos e inteligencia
artificial, sensores en contenedores que alertan sobre problemas con las
temperaturas de almacenamiento a bordo y hasta un capitán virtual, son
algunas de las tecnologías que se están desarrollando. La UNCTAD, en su último informe del Transporte Marítimo 2018, advierte
que los buques totalmente autónomos son una ambición a largo
plazo, no obstante, grandes consorcios de empresas como Rolls-Royce Marine, ya
presentó el primer prototipo de una nueva generación de buques autónomos que
podrían estar operativos en dos o tres años.
Finalmente, todas estas tecnologías emergentes que incluyen a los drones, blockchain, sensores, buques autónomos y otras más especificas como la inteligencia artificial, el Internet de las cosas, entre otras, su introducción y puesta en funcionamiento es sin lugar a dudas un gran reto para la navegación y el transporte marítimo, algo que demuestra que estamos rompiendo el paradigma ya que la transformación digital es casi indetenible, facilitan nuestra vida y llegaron para quedarse... |
Continuará...
Jeannette Pérez Fernández
Fuentes consultadas:
Global Media IT. Castellanos, Laura (enero 28, 2019).[Documento en
Línea] Disponible:
http://globalmedia-it.co/en-las-profundidades-drones-submarinos-revelan-los-secretos-bajo-el-mar/
[Consulta:
2019, abril 26]Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Comercio y Desarrollo,
(2019).
Revisión del Transporte Marítimo 2018, (UNTACD), 50 años 1968-2018.
[Documento en Línea] Disponible:https://unctad.org/en/pages/PublicationWebflyer.aspx?publicationid=2289.
[Consulta: 2019, abril 15]
Notiloplus.com. Disponible: http://www.notiloplus.com/[Consulta: 2019, abril 15]